Si algún desprevenido transeúnte pensó que el movimiento policial y logístico que se implementó ayer a la siesta en las inmediaciones del Club Central Córdoba tuvo ver con una supuesta visita del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, se equivocó. El amplio despliegue de seguridad tuvo un único fin: proteger y escoltar al titular de la CGT, Hugo Moyano, quien llegó a la provincia para apoyar la candidatura local a secretario general de Camioneros, César Torres, y respaldar a la Asociación Bancaria, tras la represión policial que sufrieron gremialistas y ex trabajadores hace un mes.
Un metro. Esa es la distancia máxima que cualquier mortal que no pertenezca al poderoso sindicato que co-conduce su hijo Pablo, tiene permitido acercarse mientras Moyano camina. Escoltado por una guardia pretoriana de fornidos hombres de pelo corto y engelado, el ex aliado de Néstor y Cristina Kirchner decidió brindar una conferencia de prensa en una sala del club. En un recinto contiguo a la cancha de básquet, el líder de la CGT cuestionó duramente a Pedro Mamaní, actual secretario general del gremio y quien está distanciado con la conducción nacional.
“Hemos venido a apoyar al compañero Torres porque hemos visto reflejado el objetivo de llevar adelante un sindicato como se merecen los afiliados. No se puede estar construyendo una obra -el edificio del Sindicato de Camioneros- durante ocho años. Esa demora no puede ser, teniendo en cuenta que hemos ayudado económicamente al sindicato para que esté al servicio del trabajador”, cuestionó.
“Está demostrado que la actual conducción no funcionó como tenía que funcionar. El actual presidente de la obra social es el actual titular del sindicato. Y en vez de ayudar a la obra social, la responsabiliza de la deuda. Y eso que le mandamos $ 18 millones todos los meses. Me comprometo, compañeros, a mejorar la sede del sindicato. Y si no lo hago, sáquenme a patadas de la conducción”, arengó el sindicalista.
Cuando finalizó el mitin en “CC”, Moyano partió raudamente hacia la sede de la Asociación Bancaria (Congreso al 600) para encontrarse con Carlos Cisneros, el referente local del gremio bancario. Ante un auditorio colmado, el titular de CGT opositora repudió la brutal represión policial que sufrieron dirigentes y ex empleados de la entidad cuando protestaron, hace un mes, en la plaza Independencia. También se comprometió a acompañar a Cisneros en la lucha gremial.
“Desde tan lejos, si bien escuchábamos que había sido muy fuerte la represión policial, al ver las fotos de los compañeros lastimados no lo podía creer. Es algo inconcebible para un Gobierno que se adjudica ser nacional y popular que proceda con la represión ante un pedido gremial legítimo. Es inentendible. Tenemos que estar a la par de los trabajadores, aunque a nivel nacional los dirigentes (bancarios y camioneros) estemos distanciados. Los días 12 y 13 de junio vamos a estar con los bancarios”, prometió Moyano.
Previamente, Cisneros había agradecido la presencia del sindicalista. “Con Camioneros nos une una vieja amistad”, recordó.
“Si ganamos el domingo, tal vez sea presidente”.- El líder de la CGT. Hugo Moyano lanzó una chanza que fue festejada por los periodistas, dirigentes y guardaespaldas que presenciaron la conferencia de prensa brindada en una sala del Club Central Córdoba. Luego de lanzar críticas hacia el Gobierno nacional, LA GACETA le preguntó: ¿piensa, entonces, ser candidato a Presidente? La respuesta de Moyano fue rápida. “Por el momento, no. Si ganamos el domingo y ascendemos, tal vez lo sea”, respondió el camionero, en alusión al partido que diputará Independiente de Avellaneda, el club de sus amores.